Las autoridades de Rusia y de Ucrania han llegado a un acuerdo sobre la demarcación de fronteras en el Mar de Azov y el estrecho de Kerch, según anunció ayer el presidente ruso, Vladimir Putin, en su visita a Kiev. Este contencioso originó el año pasado un conflicto bilateral. La resolución del problema era importante para Ucrania, que quiere iniciar cuanto antes negociaciones con la UE.