Colombia aseguró que tiene al menos dos documentos "tremendamente reveladores" que demuestran la existencia de "vínculos" entre el Gobierno del presidente ecuatoriano, Rafael Correa, con las FARC, al tiempo que pidió explicaciones.

El director de la Policía de Colombia, general Oscar Naranjo, precisó que las informaciones han sido halladas en una de las computadoras incautadas al portavoz internacional y número dos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Raúl Reyes, quien murió, el sábado, en una operación en territorio ecuatoriano.

Según Naranjo, la información de la computadora permite "de manera contundente e indiscutible, presentar por lo menos dos documentos tremendamente reveladores y, en nuestra opinión, muy graves, en cuanto que afectan la seguridad nacional colombiana".

El jefe policial precisó que en un documento, fechado el 18 de enero, Reyes se dirige al mando de las FARC y detalla que el ministro de Seguridad de Ecuador, Gustavo Larrea, en nombre del presidente del Ecuador, "tiene el interés de oficializar las relaciones con la dirección de las FARC". Igualmente, en el mencionado documento Reyes señala que Larrea manifestó a los rebeldes "que la política ecuatoriana es negarse a participar del conflicto interno colombiano, con apoyos al Gobierno Uribe".

También, según Naranjo, se solicita al máximo jefe de las FARC, Manuel Marulanda, alias "Tirofijo", un aporte que impulse la gestión de Correa en el canje humanitario, que podría ser entregarle a ese gobierno al cabo Pablo Emilio Moncayo, en poder de los rebeldes desde hace más de 10 años. También señala el documento, dirigido por "Reyes" al secretariado del grupo rebelde, que el Gobierno ecuatoriano se compromete a relevar los mandos policiales y militares hostiles a las FARC.

Otros miembros relacionados

En otro documento, también escrito por Reyes, se deja entrever que el ministro ecuatoriano Larrea tuvo contactos directos con ese jefe de la guerrilla, ya fuera en Colombia o en Ecuador.

Antes de conocerse estas revelaciones, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia pidió excusas al de Ecuador por la incursión de "helicópteros colombianos" y militares en ese país para verificar lo sucedido en la operación en que murió Raúl Reyes.

"El Gobierno colombiano nunca ha tenido la pretensión o la disposición de irrespetar o vulnerar la soberanía o la integridad de la hermana República del Ecuador, de su pueblo o de sus autoridades, por las que ha profesado, históricamente, afecto y admiración", dijo el canciller colombiano Fernando Araújo, encargado de leer la declaración.

Precisó que militares colombianos rescataron el cuerpo de Luis Edgar Devia, verdadero nombre de alias "Raúl Reyes", al igual elementos personales, tres computadores, documentos y correspondencia del "terrorista". Agrega que los militares colombianos trasladaron los cadáveres de Reyes y otros rebeldes a territorio colombiano para "evitar que la guerrilla los suplantara, en cumplimiento de una práctica que acostumbra realizar, para acusar a nuestras fuerzas de ejecuciones extrajudiciales".

Tras conocer la postura del Gobierno del presidente colombiano Álvaro Uribe, su colega ecuatoriano, Rafael Correa, anunció la "expulsión inmediata" del embajador de Colombia en Quito, Carlos Holguín, tras la retirada de su embajador en Bogotá, Francisco Suéscum. Correa, igualmente, solicitó la reunión urgente de la OEA y la CAN para analizar el ataque colombiano en territorio ecuatoriano, al tiempo que dio la orden de "movilización de tropas" en la frontera con Colombia de la que exigió no solo disculpas, sino "compromisos firmados de respeto a Ecuador".