Al menos 14 personas murieron hoy y más de 30 resultaron heridas al hacer estallar una mujer un cinturón con explosivos en la ciudad de Baquba, al noreste de Bagdad, y al menos otras tres fallecieron en Kirkuk, norte del país, al estallar una bomba colocada bajo su coche, informaron fuentes policiales. Según las fuentes, la suicida hizo detonar la carga a la entrada de la sede del gobierno de la provincia de Diyala, en un lugar en el que había aparcado un gran número de coches de policía.

Muchas de las víctimas del atentado son agentes a cargo de la protección del complejo gubernamental, que ha sido blanco frecuente de ataques por parte de la insurgencia suní. "El recuento es preliminar, y el número de víctimas podría ser mucho mayor", indicó un portavoz policial que pidió no ser identificado. Un gran número de ambulancias se desplazó al lugar de los hechos para atender y evacuar a los heridos.

El de hoy se trata del decimocuarto ataque suicida cometido por una mujer en Diyala en los últimos meses. Casi todas ellas fueron reclutadas por la red terrorista de Al Qaeda en Irak, el más violento de todos los grupos insurgentes que operan en este país árabe. La provincia de Diyala, junto a la frontera con Irán, acoge a árabes, chiíes y kurdos, y es uno de los principales bastiones de grupos insurgentes pese a una operación a gran escala contra ellos en los últimos meses.

Por otro lado, al menos tres personas murieron hoy, entre ellas dos mujeres, y otras dos resultaron heridas por la explosión de un artefacto colocado bajo su coche cerca de la ciudad de Kirkuk, norte de Irak, según informó un portavoz policial. Sarhad Qader, portavoz de la Policía en Kirkuk, explicó que el atentado tuvo lugar en el pueblo de Rashad, 30 kilómetros al suroeste de Kirkuk, un área que está habitada por árabes, kurdos y turcomanos.

Sin embargo, Qader no explicó por qué ese coche fue objetivo de la explosión, aunque reveló que es el segundo incidente en Kirkuk o sus alrededores en las últimas horas. Una explosión similar tuvo lugar horas antes cerca de la sede de la Media Luna Roja en esta rica ciudad petrolera, lo que causó grandes daños materiales pero ninguno personal.

Kirkuk, capital de la provincia de Tamim, es una antigua pretensión de los kurdos, que quieren que la ciudad y sus alrededores se anexionen a la región autónoma del Kurdistán, que goza de un alto grado de independencia con respecto a Bagdad.