A pesar de que el juez que se encarga de investigar el caso Kelly se comprometió ayer a llegar hasta el fondo del asunto, dos destacados disidentes laboristas, Robin Cook y Clare Short, expresaron sus dudas de que las pesquisas lleguen a buen puerto si no se examinan las razones por las que Blair se lanzó a la guerra contra Irak.

El exsecretario del Foreign Office Robin Cook aseguró: "La misión del lord Hutton es imposible", en un artículo publicado ayer por The Independent. Para el exministro de Blair, al juez se le dijo que investigue la muerte de Kelly, pero que soslaye los motivos reales que iniciaron el conflicto. "El Gobierno ha decidido desatar una guerra contra la BBC como maniobra de diversión para no tener que explicar las razones por las que desencadenó la guerra contra Irak". afirmó.

TELEDIRIGIR LOS ATAQUES

Con igual contundencia contra el primer ministro británico se expresó su excolaboradora Clare Short. La exministra de Desarrollo Internacional acusó a Tony Blair de teledirigir los ataques en que se imputa la responsabilidad de la muerte de Kelly a la BBC para desviar el debate sobre la intervención armada contra Irak y la controversia generada por los errores, las mentiras y las pruebas falseadas que sirvieron para justificar la guerra. "Todo esto forma parte de maniobras de distracción para evitar la verdadera pregunta que es. ¿En qué condiciones hemos decidido ir a la guerra contra Irak? Es, en realidad, una pantalla de humo", aseveró ayer Short.