El Gobierno de EEUU envió ayer una delegación de alto nivel a Turquía para rebajar tensiones e intentar convencerle de que no haga una incursión militar en el norte de Irak contra los refugios de la guerrilla del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK)

Eric Edelman, secretario de Estado adjunto de Política de Defensa, y Dan Fried, secretario de Estado adjunto para Asuntos Europeos y Euroasiáticos, intentaron minimizar el malestar en Turquía por la aprobación el miércoles en un comité del Congreso de EEUU de una resolución que reconoce el genocidio armenio en el Imperio Otomano en la primera guerra mundial. Ayer, el ministro turco para el Comercio Exterior, Kürsad Tüzmen, anuló un viaje a EEUU como protesta.