Dos personas murieron y otras doce resultaron heridas, una de las cuales se encuentra en estado crítico, al estallar esta madrugada un artefacto en un café en pleno centro de Pristina, la capital de Kosovo, informó la policía. El portavoz policial, Veton Elshani, declaró que la explosión ocurrió a las 02.10 hora local (00.10 GMT) en el Bulevar Bill Clinton, una céntrica calle comercial donde todavía seguían abiertos algunos cafés y restaurantes. Indicó que todavía se desconoce el objetivo y los motivos de la explosión, así como la cantidad de explosivo usado.

El Gobierno kosovar condenó lo ocurrido en Pristina como un acto criminal que perjudica los intereses de la región y aseguró que la explosión no está de ninguna forma vinculada con el proceso político para determinar el futuro estatuto de Kosovo. "No permitiremos que tales actos pongan en peligro la estabilidad en Kosovo. Lucharemos hasta el final contra el crimen. Los que intentan esconderse de la ley tendrán que enfrentarse a la justicia", declaró el primer ministro, Agim Çeku, en un comunicado. El Gobierno pidió que se esclarezca cuanto antes el incidente de la madrugada en la capital.

El experto para asuntos de seguridad en Kosovo y diputado en el Parlamento, Naim Maloku, declaró que, según las informaciones de las que dispone, la explosión parece apuntar a un ajuste de cuentas entre dos organizaciones criminales. La policía acordonó inmediatamente el lugar de la explosión, que causó la rotura de los cristales de varios inmuebles cercanos y otros daños materiales. También llegaron al lugar de los hechos miembros de la fuerza KFOR de la OTAN, para ayudar en la investigación de lo ocurrido.

Fuentes del hospital de Pristina informaron de que cuatro de los heridos sufrieron heridas graves y uno se encuentra en estado crítico. El atentado coincide con un aumento de la tensión en el seno de la mayoría étnica albanesa, a la que pertenece el 90 por ciento de la población, y que aspira a la independencia de Serbia.

Esta semana están previstas unas conversaciones en Nueva York sobre el estatus definitivo de Kosovo, actualmente parte de Serbia, pero bajo tutela de la ONU desde 1999. Una nueva fase de negociaciones del estatus, con mediación de la "troika" de la Unión Europea (UE), Estados Unidos y Rusia, comenzó el mes pasado, después de que fracasara un intento de aprobar en el Consejo de Seguridad de la ONU un plan que otorgaba a Kosovo una independencia supervisada internacionalmente. La reunión de Nueva York, prevista para el próximo día 28, será un primer encuentro directo entre serbios y albaneses.