Dos peronistas, aunque de posturas ideológicas distintas, Carlos Menem y Néstor Kirchner, lucharán por la presidencia de Argentina en la segunda vuelta de las elecciones prevista para el 18 de mayo, según tres sondeos a pie de urna.

De acuerdo con la consultora Zulueta Puceiro, Menem, que gobernó entre 1989 y 1999, sacará el 24,1% de los votos, contra 20,7% del gobernador de la patagónica provincia de Santa Cruz. Según el estudio realizado por Julio Aurelio, Menem conseguirá el 24,2% de los votos, y Kirchner, el 23%. El Centro de Estudios de la Opinión Pública (CEOP) otorga a los candidatos un 25% y un 21% de la votación, respectivamente.

Siempre según estas encuestas, el exradical de centroderecha Ricardo López Murphy sería tercero, con el 17%. Como el margen de error de los sondeos es del 3%, las distancias pueden acortarse y llegar incluso a beneficiar a Elisa Carrió (centroizquierda), cerca de López Murphy. La misma lógica puede aplicarse en el caso del peronista Adolfo Rodríguez Saá.

SUSPENSO HASTA EL FINAL

La quinta contienda presidencial desde que el país recuperó la democracia es la primera que debe dirimirse en segunda vuelta. La Constitución dice que sólo puede haber un ganador en primera instancia si tiene más del 45% de los votos, o el 40% y 10 puntos de ventaja sobre el segundo.

Si se confirman los sondeos, se dará un hecho inédito: el peronismo --que gobernó entre 1945 y 1955; entre 1973 y 1976 (gestiones inconclusas por sendos golpes militares); en los 90, con Menem y, tras la caída de Fernando de la Rúa, de la mano de Eduardo Duhalde-- enfrentará a dos candidatos en estas elecciones.

Estimaciones previas indican que, en una segunda vuelta, Menem no podrá superar la intensa ola de rechazo social que existe más allá de su voto cautivo. El expresidente tendrá problemas para seducir a un sector de derechas que ayer optó por López Murphy y que preferiría a Kirchner antes que a alguien que critica el neoliberalismo económico.

Durante la jornada electoral, hubo incidentes menores como el que tuvieron que enfrentar López Murphy y el expresidente De la Rúa cuando fueron a votar. "Devuelve el dinero, ladrón", y "traidor", le gritaron al segundo manifestantes de agrupaciones menores de izquierda. Su entrada y salida de la mesa de votación causó empujones y tumultos.