Un 73 por ciento de los procesados en relación con los disturbios de agosto en varias ciudad inglesas tenían antecedentes policiales, según unas estadísticas publicadas hoy por el Ministerio de Justicia británico. Estos datos muestran además que el 26 por ciento de los 1.715 acusados había estado ya en la cárcel y había cometido una media de quince delitos con anterioridad. Las cifras de Justicia también revelan que las penas impuestas a los acusados por los disturbios, de los que el 90 por ciento son hombres, fueron entre dos y tres veces más duras de lo que normalmente son para delitos similares.

El ministro de Justicia británico, Kenneth Clark, reconoció hoy no estar seguro si los implicados en los disturbios estaban organizados o pertenecían a bandas, pero dijo que las cifras demuestran el carácter delictivo de los implicados. En unas declaraciones a la cadena pública BBC, Clark dijo estar "consternado" por el perfil reincidente de un número tan elevado de los responsables de los disturbios que azotaron la capital británica y otras ciudades inglesas del 6 al 10 de agosto.

Los datos presentados hoy muestran además que 176 de los encarcelados fueron condenados a penas de una media de once meses y que los juzgados por robo durante los saqueos han recibido sentencias de 14 meses, un 60 por ciento mayores que lo habitual. Lo mismo ocurre con los encarcelados por desórdenes violentos y hurtos, que han visto sus condenas duplicarse y triplicarse, respectivamente. Las penas recibidas por los acusados de los disturbios, la mitad de los cuales tenía menos de 20 años, han sido muy criticadas debido a su dureza por organizaciones de derechos civiles y numerosos juristas.