Ecuador parece asomarse al horizonte de la segunda vuelta presidencial del 11 de abril. El Consejo Nacional Electoral (CNE) informó que el correista Andrés Arauz finalmente competirá con el banquero Guillermo Lasso. El secretario del CNE, Santiago Vallejo, dio a conocer, tras dos semanas de incertidumbre, que Arauz, obtuvo el 32,72% de los votos, contra el 19,74% del candidato de la coalición conservadora. El abogado Yaku Pérez, abanderado del movimiento indígena, cosechó el 19,38% de las adhesiones. Hasta el momento, Pérez no ha presentado las impugnaciones correspondientes que contempla la ley electoral, a pesar de haber denunciado un "fraude" en las urnas.

El recuento, cuya postergación había provocado una crisis política, fue aprobado con el voto de cuatro de los cinco miembros del CNE durante las primeras horas de este domingo. "Vamos a la segunda vuelta con ánimo y optimismo", reaccionó Lasso en su cuenta de Twitter. "Conmigo siempre habrá el espacio para tener un diálogo frontal y sincero", dijo, en un claro mensaje a Pérez, quien días atrás rechazó cualquier posibilidad de respaldarlo en el segundo turno.

Lasso, de 65 años, aspira por tercera vez a la presidencia ecuatoriana. Esta vez no peleará con Rafael Correa, como en 2013, sino con su delfín, quien estuvo a un poco más de siete puntos de imponerse en el primer turno. Esta vez, confía no solo aglutinar detrás suyo al voto de derechas, en especial el social cristiano, sino a los ecuatorianos de centro e incluso izquierda que rechazan la posibilidad de una vuelta de lo que califica de populismo y estatismo. La elección de abril tendrá, por lo tanto, un fuerte componente de polarización.

Las dos semanas de demora y tensión en el recuento de los votos ha dejado flotando en el aire un aire de sospecha, al punto de que, más allá de los pedidos de transparencia formulados la Organización de Estados Americanos (OEA), la Contraloría (fiscalía) solicitó al CNE que le permita realizar una auditoría al sistema informático electoral. De cara al 11 de abril, señaló, se necesita "garantizar" la "seguridad jurídica" y la "legitimidad" de los comicios para general un "ambiente de confianza".

Denuncias de injerencia

Arauz habló de una "interferencia y grosera intromisión" de la Contraloría que amenaza con interrumpir la dinámica del proceso electoral. "Esto es abiertamente ilegal. No debe permitirse. Hay intentos de impedir la realización de la segunda vuelta de manera oportuna". El joven economista llamó al Tribunal Contencioso Electoral a expedirse sobre esta "manipulación" que busca extender el mandato del actual presidente, Lenin Moreno. "No aguantamos un día más de este desgobierno". La mayoría de la sociedad, dijo, rechaza "manipulaciones".

Arauz pidió a los observadores internacionales estar atentos y no abandonar el país. Subrayó además que el 24 de mayo debe tomar posesión el próximo mandatario. "Siempre vamos a defender la voluntad del pueblo ecuatoriano y los derechos a decidir sobre su futuro. No permitamos que ninguna decisión modifique el calendario electoral".

Moreno asumió en 2017 y, de inmediato, rompió su alianza con Correa apenas asumió la presidencia. Termina su gestión con una popularidad del 7%.