El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) ha anunciado este viernes que los estudiantes extranjeros matriculados por primera vez no podrán entrar en el país norteamericano si sus cursos se desarrollan online.

"Los estudiantes no inmigrantes con estatus nuevo o inicial después del 9 de marzo no podrán entrar en Estados Unidos para inscribirse en un centro educativo del país como un estudiante no inmigrante para el semestre de otoño para seguir un curso completo que sea 100 por ciento online", ha señalado el ICE en un comunicado.

Así, estará permitido que los estudiantes ingresen en Estados Unidos para matricularse en un curso que sea híbrido -presencial y online- para el semestre de otoño.

Estas reglas no se aplicarán a los estudiantes extranjeros que ya estaban matriculados en centros educativos o universidades el semestre pasado y regresan al país para continuar con sus estudios, aunque su curso sea totalmente online.

A principios de julio, el ICE informó de que no se concederían visados a estudiantes extranjeros cuyos cursos se desarrollaran online durante el semestre de otoño, por lo que tendrían que abandonar el país o correrían el riesgo de ser deportados. El ICE precisó que los estudiantes radicados en EEUU con ciertos visados "no pueden tener un curso completo online y permanecer en Estados Unidos".

Sin embargo, una fuente citada por la cadena de televisión CNN ha señalado que la Casa Blanca consideró la propuesta un revés y que algunas personas del Ala Oeste creen que estaba mal concebida y ejecutada. La diferencia entre ambas normas es que la anunciada este viernes sólo se dirige a los nuevos estudiantes en lugar de a los que ya se encuentran en el país norteamericano.

Multitud de universidades de todo Estados Unidos están comenzando a decidirse por cambiar a las clases online como resultado de la pandemia del coronavirus, que ya ha dejado en el país norteamericano más de cuatro millones de contagios y más de 145.000 muertes.

No es la primera decisión en el marco de la pandemia de la Administración del presidente, Donald Trump, que limita la inmigración hacia Estados Unidos. El mes pasado, la Casa Blanca ya emitió una proclamación sobre inmigración que restringía la inmigración legal al país.