Por primera vez, el Gobierno de EEUU ha aceptado indemnizar a una de las cientos de personas detenidas en la violenta reacción contra los musulmanes que siguió al 11-S. Aunque el Departamento de Justicia no reconoce haber actuado de forma errónea, compensará con 300.000 dólares al ciudadano egipcio Ehab Elmagraby, arrestado en octubre del 2001 y retenido en una prisión de Nueva York hasta agosto del 2002.

"Es una cantidad respetable y demuestra por primera vez que se pueden pedir responsabilidades al Gobierno por abusos que han sucedido en Abú Graib, en Guantánamo y en prisiones de EEUU", dijo uno de los letrados de Elmagraby, Alexander A. Reinert. Su defendido demandó en el 2004 al Gobierno de George Bush, tras haber sido esposado, golpeado, insultado y aislado durante gran parte de su cautiverio. También el paquistaní Javaid Iqbal ha demandado al Gobierno.

Por otra parte, The New York Times demandó el lunes al Pentágono para que el Departamento de Defensa le entregue los documentos internos y correos electrónicos que establecen el programa de espionaje a ciudadanos estadounidenses. El rotativo exige también conocer los nombres de las personas vigiladas.