Rusia está mucho más cerca de ingresar en la Organización Mundial del Comercio (OMC) después del acuerdo al que llegaron ayer su presidente, Vladimir Putin, y su homólogo estadounidense, George Bush. "Es un buen acuerdo para nosotros, para ellos y para la comunidad internacional", aseguró Bush durante la clausura del foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) que este fin de semana se ha celebrado en Hanoi (Vietnam).

La entrada de Rusia permitirá a sus exportaciones beneficiarse de las tarifas arancelarias de la OMC a cambio de amoldar sus normativas. Para frenar su acceso, Washington esgrimía la tibia lucha de Moscú contra la piratería intelectual y las limitaciones a la banca extranjera. Sin embargo, los analistas creen que eran desacuerdos geopolíticos y no económicos los que impedían el acuerdo. Este llega tras el recorte ruso en el Consejo de Seguridad de la ONU a las sanciones que Washington propuso para Irán.

Por otra parte, los 21 países de la APEC mostraron en un comunicado su "grave preocupación" por la prueba nuclear de Pyonyang, una declaración suave que EEUU consideró del todo insuficiente.