Un tribunal de EEUU condenó este jueves a Edward Snowden a pagar 4,2 millones de euros por los ingresos obtenidos por su libro de memorias y conferencias derivadas sin someter primero su obra a una revisión de las agencias de inteligencia estadounidenses para las que trabajó.

Así lo informó el Departamento de Justicia, que argumentó que al no enviar el libro para una inspección previa a la publicación, Snowden violó los acuerdos de no divulgación que firmó mientras trabajaba para la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) y la Agencia Central de Inteligencia (CIA).

Esos pactos obligaban a Snowden a permitir que esas agencias examinaran cualquier información que pretendiera publicar y que se basara en datos confidenciales "obtenidos como resultado" de su relación con la NSA y la CIA.

"Edward Snowden violó sus obligaciones legales con Estados Unidos y, por lo tanto, sus ganancias financieras ilegales deben ser entregadas al Gobierno", señaló el fiscal general adjunto de Estados Unidos, Jeffrey A. Rosen, en un comunicado al anunciar el dictamen.

De este modo, el fallo emitido por el Tribunal para el Distrito Este de Virginia impone un fideicomiso para las ganancias actuales y futuras del libro de las memorias de Snowden y 56 discursos ya realizados.

Asilo en Rusia

La Justicia estadounidense también explicó al tribunal que Snowden ha residido en Rusia desde 2013 después de que se le concediera asilo allí por cargos federales derivados de su filtración de información clasificada que revela los programas de vigilancia de Estados Unidos.

Snowden había trabajado para la CIA de 2006 a 2009 y subcontratado para la NSA en varias ocasiones entre 2005 y 2013.

La demanda del Departamento de Justicia se presentó el mismo día de la publicación del libro en septiembre de 2019.

Además de Snowden, la demanda también nombró a su editor, Macmillan, y solicitó al tribunal que congelara los activos relacionados con su obra.

Las memorias de Snowden son un recorrido por su vida y no incluyen nuevas revelaciones respecto a las que ya publicó en 2013, cuando abandonó Estados Unidos cargado con 1,7 millones de documentos que revelaron al mundo los programas de vigilancia masiva de teléfonos e internet de la NSA.