Rashid Rauf, un ciudadano británico de origen paquistaní que mantenía vínculos con la organización terrorista Al Qaeda, resultó ayer muerto como consecuencia de un ataque realizado por un drone (avión espía no pilotado) en el noroeste de Pakistán. Rauf es sospechoso de liderar el complot para hacer estallar en vuelo aviones comerciales en la ruta Gran Bretaña-EEUU utilizando explosivos líquidos, una trama que fue desbaratada con ayuda del espionaje paquistaní.

Rauf aterrizó en Pakistán en el 2002 y, tras su llegada, se casó con una mujer de la familia de uno de los islamistas más notorios de Pakistán, Azhar Masood Azhar. En el 2006 fue detenido y, nada más conocerse la noticia, Londres solicitó de inmediato su extradición por su supuesta vinculación con el asesinato de su tío en el Reino Unido. En los últimos tres meses se han producido al menos 20 bombardeos contra supuestos objetivos islamistas.