La Guardia Costera estadounidense informó ayer de que no ha registrado hasta el momento un aumento del número de embarcaciones que habitualmente suelen llegar a las costas de Estados Unidos con inmigrantes cubanos a bordo. Sin embargo, en previsión de los efectos ante la posible muerte de Castro, EEUU tiene establecido un plan de contingencia que incluye el envío de buques y personal extra a la zona para contenerla.