Estados Unidos y otros países abandonaron el pleno de la Asamblea General de la ONU después de que el presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, expresase sus dudas sobre los atentados del 11 de septiembre del 2001 contra Nueva York y Washington. Ahmadineyad, durante su discurso en la apertura de la Asamblea, se refirió a los atentados del 11-S como una conspiración estadounidense vinculada con Israel, lo que causó la salida de la sala de Estados Unidos.