Estados Unidos intenta edulcorar un informe del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Bertrand Ramcharan, sobre la situación en Irak, según indicaron algunos responsables norteamericanos que pidieron mantener el anonimato.

Los citados responsables explicaron que diplomáticos norteamericanos intentan suavizar el tono del informe, que se espera que sea muy crítico con Washington y con la conducta de sus tropas en Irak. De esta forma, intentan evitar otra ola de indignación, tras el escándalo de las torturas infligidas a los prisioneros iraquís por militares norteamericanos en la cárcel de Abú Graib.

La versión final debe publicarse hoy pero Washington teme que complique los esfuerzos que se llevan a cabo para que el Consejo de Seguridad de la ONU adopte el nuevo proyecto de resolución.