Estados Unidos, la Unión Europea y el Reino Unido han pedido al presidente de Siria, Bashar el Asad, que ponga fin a la represión y que negocie con la oposición, tras la matanza de Hama, en la que el Ejército causó al menos 130 muertos al arremeter con tanques contra la población civil. El presidente de EEUU, Barack Obama, ha llegado a decir que Siria "será un lugar mejor" si avanza hacia la democracia y Asad abandona el poder, y lo ha calificado de "incapaz". En un comunicado, Obama ha afirmado que está "consternado" por la campaña de represión desplegada por el régimen sirio y ha asegurado que el país será "un lugar mejor cuando avance una transición democrática". "A través de sus propias acciones, Bachar Al Asad está garantizando que él y su régimen quedarán en el pasado, y que el valiente pueblo sirio que se ha manifestado en las calles determinará su futuro", dijo el mandatario en un comunicado difundido por la Casa Blanca. Obama calificó de "horripilantes" las informaciones que ha recibido desde Hama, y consideró que "demuestran el verdadero carácter del régimen sirio". "Una vez más, el presidente Asad ha demostrado que es completamente incapaz y que se niega a responder a las quejas legítimas del pueblo sirio. Su uso de la tortura, la corrupción y el terror le colocan en el lado equivocado de la historia", indicó. El presidente se comprometió a "seguir aumentando la presión sobre el régimen sirio" en los próximos días, y a "trabajar con otros países del mundo para aislar al Gobierno de Asad y mantenerse del lado del pueblo sirio". El Reino Unido reclama más presión internacional sobre Siria, incluyendo la de las naciones árabes, para frenar las propuestas y considera que una intervención militar "no es una posibilidad remota", según el ministro de Exteriores británico, William Hague, tras la matanza perpetrada por las tropas de Bacher el Asad en la ciudad de Hama, que ha causado más de 130 muertos. Hague, en una entrevista a la BBC, pide a las naciones árabes y a Turquía que presionen a Asad paara que ponga fin a la represión. La jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, ha calificado de "inaceptable" la continuación de la represión en Siria y ha exigido que los responsables de la masacre en Hama sean llevados ante los tribunales. En un comunicado, Asthon se declaró "conmocionada" por las informaciones sobre las operaciones llevadas a cabo por el Ejército sirio en las ciudades de Hama (centro), Deir el Zor (este) y Herak (sur del país) y consideró "totalmente injustificado" el ataque producido "contra ciudadanos que ejercían su derecho a unas protestas pacíficas". Según Ashton, los últimos acontecimientos "muestran una vez más el vacío de las promesas de reforma hechas por el gobierno" y afirma que la única manera de salir de esta crisis, indicó Ashton, es "a través de un diálogo nacional" con la oposición. Desde mediados de marzo pasado, Siria es escenario de revueltas populares contra el Gobierno, que se han cobrado las vidas de 1.583 civiles y de 369 soldados y efectivos de las fuerzas de seguridad, según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos. Este lunes, Asad felicitó al Ejército sirio por su papel en Hama y aseguró que son "auténticos patriotas". Al Asad, en un discurso por el 66 aniversario de la creación del Ejército, elogia a las Fuerzas Armadas por su "lealtad" y como "un modelo de compromiso con las causas de la nación y defensores de sus derechos". El mandatario sirio ha unido su destino al del Ejército desde el comienzo de las protestas en marzo de este año, que han sido duramente reprimidas por los cuerpos de seguridad y los militares, y ha colocado al frente de las tropas a familiares suyos de la minoría chií alauí a la que pertenece. Asad señala en su discurso que existe una "conspiración cuidadosamente preparada para fragmentar Siria y todo el área", pero, según él, quienes la han tramado "olvidan que Siria tiene características únicas que la hacen inmune a las conspiraciones". "A este ataque perverso no le irá mejor que los previos. Todas las personas honradas de Siria confían en que saldremos de esta crisis más poderosos, más presentes y más efectivos regional e internacionalmente", agrega. Asimismo, destaca que el Ejército ha demostrado "lealtad a su pueblo, a su país y a su credo", y que sus "esfuerzos y sacrificios serán admirados". Para el gobernante sirio, su país continuará la presión para alcanzar una paz "justa y global basada en las legítimas resoluciones internacionales que estipulan que Israel se retire de las tierras árabes ocupadas a las fronteras anteriores al 4 de junio de 1967". Finaliza su discurso reiterando que "las dificultades nos harán más resistentes y las conspiraciones, más fuertes", y añade que la presión hará que se adhieran más a sus derechos.