Los rebeldes volvieron a pedir hoy armas y "todo tipo de ayuda" a la comunidad internacional, pero rechazaron la intervención de tropas terrestres en Libia, según Ahmed Omar Bany, portavoz oficial del ejército insurgente, creado en la zona bajo control de los sublevados. En una conferencia de prensa en Bengasi, Bany evidenció una vez más la necesidad de su ejército de recibir armas, sobre todo pesadas, con las que hacer frente a las tropas del líder libio, Muamar al Gadafi. La cúpula dirigente política y militar rebelde, así como los combatientes, se han quejado siempre de la falta de medios para poder "liberar" Libia, esto es, derrocar a Gadafi y su sistema. Bany ni confirmó ni negó la presencia de asesores militares occidentales sobre el terreno, después de que Italia, Francia y el Reino Unido prometieran que iban a mandarlos en el marco de su colaboración con los rebeldes de Bengasi. "Toda ayuda es bienvenida", aseguró Bany, quien prefirió no ofrecer detalles sobre qué tipo de apoyo está recibiendo su ejército por parte de aquellos países que han acordado financiar y asistir a los insurgentes en el este de Libia. Respecto a la situación en Misrata, que permanece bloqueada por las tropas gubernamentales desde hace más de dos meses, Bany informó de la muerte hoy de cinco civiles en un nuevo bombardeo con artillería pesada contra la ciudad. El portavoz militar dijo que el ejército del este de Libia está coordinándose con los rebeldes en Misrata, que son civiles en su mayoría, pero no está participando en las batallas en esa ciudad, porque "no es necesario". "Los revolucionarios (de Misrata) no necesitan ni armas ni hombres porque lo están haciendo muy bien: están haciéndose con las armas de las tropas de Gadafi y causando mucho daño en sus filas", aseguró Bany. El portavoz rechazó la posibilidad de que tropas terrestres de la OTAN tengan que intervenir en Misrata para asegurar la llegada de la ayuda humanitaria a la ciudad, tal y como barajó la Unión Europea. "Lo único que necesitamos es un acceso seguro a Misrata, pero no queremos tropas terrestres", recalcó. La OTAN ha intentado hasta ahora asegurar con sus barcos el acceso al puerto de Misrata, la única vía por donde puede entregarse ayuda humanitaria a la ciudad, así como evacuar a los heridos.