La Policía filipina elevó hoy a ocho los muertos en la explosión de una bomba en una ciudad de la isla de Mindanao, en el sur de Filipinas, en la que también resultaron heridas otras 30 personas.

El director general de la Policía de Mindanao Centro, Charles Calima Jr, dijo a la radio dzMM que otras dos personas murieron en el hospital a causa de las heridas que sufrieron en la deflagración, que ocurrió ayer en una concurrida avenida de la ciudad Cotabato.

Calima añadió que 13 personas siguen ingresadas en el hospital después de un atentado que no ha sido reivindicado por ninguno de los grupos armados que operan en la región.

La bomba estaba oculta en una camioneta de transporte colectivo aparcada delante de un centro comercial de una zona residencial con mucho tráfico, y la deflagración causó un incendio en dos comercios, uno de ellos una funeraria y varios vehículos.

El gobernador de la Región Autónoma del Mindanao Musulmán, Mujiv Hataman, calificó de "inusual" el atentado en Cotabato donde "había habido explosiones pero es la primera vez que se utiliza un coche bomba", en declaraciones a la televisión GMA.

La bomba fue detonada en el momento que circulaba por la zona el coche blindado de la administradora de la ciudad, Cynthia Guiani-Sayadi, quien en las últimas semanas recibió amenazas de muerte, según este canal.

Grupos armados comunistas y musulmanes operan desde hace décadas en Mindanao.

Cotabato, con una población cercana a los 300.000 habitantes entre los que conviven cristianos y musulmanes, es una de las ciudades emblemáticas de la Región Autónoma del Mindanao Musulmán.