"Ya Zelaya es historia, es parte del pasado", sostiene Porfirio Lobo. No quiere que el golpe militar del 28 de junio le salpique y sigue mostrándose al margen del conflicto. Señala que el presidente derrocado y el golpista, Roberto Micheletti, "ya firmaron un acuerdo por el que se someten a la voluntad del Congreso", dice Porfirio Lobo sin mostrar inquietud por la crisis del país.

De momento, EEUU le da el espaldarazo a través de su embajador en Honduras, Hugo Llorens: "Pepe Lobo es un hombre de gran experiencia política, buen ejecutivo y capaz. Estados Unidos trabajará con él para el bien de ambos países".