UN TRIBUNAL de Croacia aprobó ayer la extradición a Serbia de un serbio condenado por conspiración en el asesinato del primer ministro, Zoran Djindjic. Es la primera extradición entre los dos países, enemigos en las guerras de los 90. El criminal Sretko Kalinin fue condenado a 30 años de cárcel in absentia (en rebeldía).