El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, protagonizó este jueves su enésima salida de tono al declarar que Alemania“ayuda al terrorismo”, en respuesta a las críticas de la cancillera Angela Merkel sobre la detención de varios periodistas del diario 'Cumhuriyet' acusados de cargos relacionados con terrorismo.

“Nos están dando consejos”, se arrancó Erdogan durante un discurso en Ankara. “Pero somos nosotros quienes estamos preocupados por ellos. ¡Estáis ayudando al terrorismo!”, espetó el mandatario, en referencia a Berlín. “El terrorismo os golpeará como un bumerán. No esperamos nada de vosotros, pero seréis recordados en la historia por acoger terrorismo”, apostilló, en declaraciones recogidas por el diario local 'Hurriyet'.

“Estamos preocupados por que Alemania, que ha acogido bajo su protección a miembros del [grupo armado pro-kurdo] PKK y del [Frente del Partido Revolucionario de la Liberación Popular] DHKP-C, se convierta en un patio para FETÖ”, dijo, usando el nombre que el régimen turco utiliza ahora para designar a la cofradía del predicador musulmán Fetullah Gülen, a la que acusa de organizar el fallido golpe de Estado del pasado 15 de julio.

“El terrorismo es como un escorpión. En algún momento picará al que lo lleva”, agregó el controvertido líder. “No veo un futuro brillante para Alemania. Se ha convertido en un lugar donde se refugian los terroristas. Hay ataques racistas contra los turcos en Alemania. Es inaceptable que Alemania proteja a terroristas”, apuntó Erdogan.

“Si Alemania duda de si FETÖ es un grupo terrorista, les invito a venir y visitar el Parlamento turco y los edificios de las Fuerzas Especiales, que fueron bombardeados el 15 de julio”, señaló el jefe de Estado.

ACCIONES ALARMANTES

Este miércoles, Merkel había calificado de “extremadamente alarmantes” las acciones de las autoridades turcas contra la libertad de prensa y de opinión al detener a los periodistas de 'Cumhuriyet', el principal diario opositor.

El pasado 19 de octubre, Turquía amplió otros tres meses el estado de emergencia, imperante desde el 19 de julio en el país euroasiático. Miles de personas han sido despedidas de sus trabajos y varias decenas de miles permanecen bajo arresto en una purga contra cualquier indicio de disidencia tras la intentona golpista que ha afectado a en torno a un millón de personas en Turquía, según el líder de la oposición, Kemal Kiliçdaroglu.