El Gobierno de Estados Unidos manifestó su deseo de que el acceso humanitario al campo de desplazados de Rukban, en el sur de Siria y en la frontera con Jordania, sea "más frecuente y sostenido".

"Deseamos un proceso más frecuente y sostenido para la entrada de asistencia humanitaria necesitada de forma urgente desde Damasco a Rukban, mientras trabajamos con nuestros socios para encontrar una solución sostenible para los decenas de miles de desplazados del campamento, la mayoría menores y mujeres", dijo el portavoz del Departamento de Estado, Robert Palladino, en un comunicado.

ENVÍOS DE AYUDA URGENTE

En ese sentido, instó a que haya "un acceso humanitario rápido, sostenido y seguro" para los habitantes de Rukban y el resto de personas en situación vulnerable en Siria. La Media Luna Roja Siria y la ONU enviaron un gran convoy de ayuda a Rukban, que no había recibido suministros en tres meses.

La caravana, compuesta por 133 camiones, partió en dirección al campo de refugiados, donde cerca de 40.000 personas viven "en condiciones desesperantes", afirmó la Media Luna Roja Siria en un comunicado. Palladino se felicitó por el envío de este cargamento de asistencia, el segundo desde noviembre.

"Reconocemos los esfuerzos valientes de los trabajadores humanitarios de la ONU y SARC (siglas en inglés de la Media Luna Roja Siria), que están llevando a cabo esta distribución", indicó el portavoz, quien agradeció también a la ONU su "apoyo incansable" para garantizar que la asistencia llegue a todos los sirios que la necesitan.

Palladino subrayó que "Estados Unidos es el mayor donante único en la respuesta a Siria, proporcionando más de 9.100 millones de dólares en asistencia humanitaria para los afectados por el conflicto dentro de Siria y en la región desde el inicio de la crisis" en marzo de 2011.

CONDICIONES MUY COMPLICADAS

El campo de desplazados se encuentra en una zona desértica cerca de la base militar de Al Tanf, de la coalición internacional liderada por EEUU y próxima al trifinio entre Siria, Irak y Jordania. Las autoridades jordanas impiden el acceso al campo desde su territorio desde 2016, tras un atentado reivindicado por el grupo terrorista Estado Islámico (EI) en el que murieron siete soldados jordanos.

Las organizaciones humanitarias han denunciado reiteradamente las duras condiciones en las que viven los desplazados en Rukban, al que rara vez tienen acceso por la prohibición del Ejército jordano y por las restricciones que impone el Gobierno sirio. El pasado 15 de enero, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) denunció que al menos ocho niños, la mayoría menores de un año, habían muerto en un mes por las bajas temperaturas y la falta de asistencia médica.