Las fuerzas de Damasco han arrebatado al Estado Islámico (EI) su último bastión en Siria, Abu Kamal, en la provincia de Deir Ezzor. La operación se ha llevado a cabo con el apoyo de las milicias chiís de Irak.

Un comunicado del comando general del Ejército ha afirmado que este jueves la ciudad ha sido liberada de los yihadistas y que ahora las tropas sirias luchan por recuperar los últimos territorios aún controlados por el EI en el desierto oriental. También ha señalado la importancia de esta operación ya que “significa la caída total de la organización terrorista en la región”.

La ofensiva se inició el miércoles y ha comportado varios enfrentamientos entre las tropas del presidente Bashar al Asad y los radicales, según la agencia de noticias SANA. Sin embargo, no se han registrado víctimas mortales en ninguno de los dos bandos.

Ciudad clave para el EI

Abu Kamal pertenece a la provincia de Deir Ezzor, en la frontera con Irak, y es el último feudo que conservaba el EI en el país. Durante los últimos tres años, los yihadistas han usado esta ciudad fronteriza para enviar suministros militares a los terroristas en Irak.

El Gobierno sirio tomó Deir Ezzor el pasado viernes tras una lucha que duró dos meses y que contó con las fuerzas aéreas rusas y las milicias chiís comandadas por Irán. La pérdida de esta provincia, rica en petróleo, se suma a las derrotas que el EI ha sufrido durante los úlitmos meses en Siria, como la pérdida de Raqqa el pasado octubre.