La ONU ha denunciado hoy que el grupo yihadista Estado Islámico (EI) tiene capturadas como esclavas a unas 3.500 personas, mayoritariamente mujeres y niños, en Irak.

En las zonas que controla en este país y en la vecina Siria, el EI ha impuesto un régimen de terror y comete violaciones de los derechos humanos de todo tipo, entre ellas ejecuciones en público, torturas y violaciones. De hecho, los yihadistas llegaron a publicar una lista de precios de mujeres, según su edad.

“Los retenidos son predominantemente mujeres y niños y proceden principalmente de la comunidad yazidí, pero hay también personas de otras comunidades étnicas y religiosas minoritarias”, afirma un informe conjunto de la Misión de Asistencia de la ONU para Irak y la oficina de Derechos Humanos de la ONU.

POSIBLE GENOCIDIO

El documento, publicado en Ginebra, afirma que muchos de los abusos cometidos por los yihadistas del EI contra civiles “son crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad y posible genocidio”.

El EI tiene en su poder amplias zonas de Irak y Siria en las que decretó “un califato” cuya capital de facto es la ciudad siria de Raqa.