Estados Unidos y el mando militar supremo de la OTAN reclamaron ayer a los países aliados europeos el envío de más tropas a Afganistán para desencadenar una ofensiva en primavera que frene los ataques talibanes. Sin embargo, España, Francia, Italia, Alemania, Holanda y Turquía rechazaron en el Consejo de Ministros de Defensa de la Alianza Atlántica en Sevilla el envío de más soldados a la fuerza internacional de estabilización de Afganistán (ISAF). Solo Polonia, Gran Bretaña y la República Checa reiteraron sus prometidas aportaciones adicionales de tropas para la operación.

El ministro de Defensa español, José Antonio Alonso, insistió en que España no incrementará el número de sus tropas desplegadas en Afganistán, porque es el adecuado para desempeñar la misión encomendada de garantizar la seguridad en la región oeste del país. No obstante, el ministro ofreció el envío de dos equipos para entrenar a dos batallones del Ejército afgano y de cuatro aviones de reconocimiento no tripulados, así como apoyo financiero para la compra de equipos militares por parte de las fuerzas afganas.

Misión de paz"La misión de Afganistán es para ganar la paz, no para hacer la guerra", destacó Alonso ante la insistencia de EEUU y del comandante supremo aliado, el general norteamericano Bantz Craddock, en la próxima "ofensiva de primavera" aliada en Afganistán.

El ministro de Defensa alemán, Franz Josef Jung, recalcó que el esfuerzo aliado debe centrarse en el desarrollo y reconstrucción de Afganistán, que es lo único que puede asegurar la estabilidad del país a largo plazo. Jung recordó que en la década de los 80 "los rusos enviaron más de 100.000 soldados a Afganistán y no ganaron". Su homóloga francesa, Mich¨le Alliot-Marie, subrayó asimismo que la OTAN debe fijarse unos objetivos más precisos antes de seguir pidiendo más tropas a los países aliados.

El comandante supremo aliado, con el respaldo de Estados Unidos y del secretario general de la OTAN, Jaap de Hoop Scheffer, reclamó a los países aliados seis batallones adicionales totalmente equipados, lo que supone una aportación de entre 4.000 y 5.000 efectivos militares. El general Craddok también reclamó helicópteros y cazabombarderos. De Hoop Scheffer insistió en que "la ISAF debe disponer de los medios y las capacidades para hacer su trabajo".

El secretario de Defensa norteamericano, Robert Gates, afirmó que "el 2007 es un año crucial para Afganistán y la misión de ISAF". "La ofensiva de primavera debe ser nuestra ofensiva" para romper la tendencia de ataques crecientes de los talibanes, señaló Gates. Más de 4.000 personas murieron el año pasado en Afganistán a causa de los combates y los atentados, cuatro veces más que en el 2005. Gates alabó los esfuerzos de España y Alemania en Afganistán y destacó que ambos hacen un "buen trabajo" en el país.

Denuncia a RumsfeldPor otra parte, el Foro Social de Sevilla y las distintas organizaciones contrarias a la organización de la reunión de la OTAN formalizaron ayer una denuncia para que el exsecretario de Defensa de EEUU Donald Rumsfeld sea juzgado por crímenes contra la humanidad en la guerra de Irak. De no considerarse probados los hechos, le acusan de ser responsable subsidiario por "negligencia u omisión".