Los cuerpos de Nicolae Ceausescu y de su esposa Elena, enterrados en un cementerio de Bucarest, han empezado a ser exhumados hoy, más de 20 años después de haber sido ejecutados, para someterlos a análisis con el fin de verificar a través de pruebas de ADN si se trata del dictador rumano y de su mujer, según ha anunciado su yerno, Mircea Opran.

"La exhumación ha empezado", ha explicado un trabajador del cementerio de Ghencea, que no ha querido dar su nombre, a los periodistas a quienes se ha prohibido la entrada al recinto.

La familia de dictador ha pedido la exhumación para verificar las identidades de los dos cuerpos. "Hoy se tomarán muestras para someterlas luego a análisis. Queremos saber si son realmente ellos" quienes están en el cementerio de Ghencea de Bucarest, ha declarado Opran a la televisión privada rumana Realitatea TV.

El resultado de las pruebas de identificación pueden tardar varias semanas en conocerse. Una vez efectuadas las extracciones para los análisis, los cuerpos serán enterrados de nuevo.

Nicolae Ceausescu dirigió Rumania con mano de hierro desde 1965 hasta 1989, cuando el dictador se dio a la fuga junto a su mujer en diciembre de 1989. Tras ser arrestados y juzgados en un proceso expeditivo, fueron ejecutados el 25 de diciembre de 1989. Según las autoridades, los cuerpos del matrimonio fueron enterrados en el cementerio de Ghencea en Bucarest.