El expresidente de Serbia, Milan Milutinovic, se entregó ayer voluntariamente al Tribunal Penal Internacional para la ex-Yugoslavia (TPI), cuya fiscalía le acusa de crímenes contra la humanidad perpetrados en Kosovo en 1999.
Milutinovic viajó desde Belgrado hasta el aeropuerto de Amsterdam en un avión especial puesto a su disposición por el Gobierno yugoslavo, y fue trasladado inmediatamente al centro de detención del TPI en La Haya.
El procesamiento de Milutinovic, al igual que el de otros tres miembros de la cúpula política y militar del régimen del expresidente yugoslavo, Slobodan Milosevic, figura en la misma acta de acusación en la que también fue inculpado Milosevic, cuyo juicio se está ya celebrando en La Haya desde.hace varios meses.
CAMPAÑA DE TERROR
Milutinovic, que fue presidente de Serbia desde 1997 hasta el pasado 29 de diciembre, fecha en que expiró su mandato, está acusado, junto a los otros inculpados, de haber orquestado la campaña de terror que, a principios de 1999, provocó la huida de 800.000 albanokosovares y la muerte de otros varios centenares.
Con su entrega voluntaria, Milutinovic, de 60 años y que padece una enfermedad cardíaca, ha evitado a las actuales autoridades yugoslavas y serbias el mal trance de verse obligadas a detenerlo y extraditarlo. La concesión de la libertad provisional a Milutinovic puede depender de la disponibilidad o no del propio Milutinovic en colaborar con el tribunal respecto al proceso a otros acusados. En el pasado, Milutinovic dijo que jamás declararía contra Milosevic.
