Los incendios que amenazaban con alcanzar el Centro Nuclear Federal de Sarov, en la región de Nizhni Nóvgorod, fueron extinguidos hoy, informó el Ministerio de Situaciones de Emergencia de Rusia. "El reconocimiento aéreo mostró hoy que la situación es estable en su mayor parte y controlable. No hay fuego en Sarov. Los últimos incendios en la república de Mordovia, al sureste de Moscú, han sido extinguidos", dijo el jefe de la oficina regional de ese ministerio en el Volga, Ígor Panshin, citado por la agencia Interfax.

Efectivos del Ejército, bomberos y personal de la central nuclear de Sarov limpian ahora el sur y el noreste de la zona afectada por los incendios para evitar que se reaviven. "Si la situación continúa así, la retirada de los miembros del Ejército y la reducción de efectivos en Sarov comenzará la próxima semana", señaló un comunicado de Emergencia. El Centro de Sarov, donde se fabricó la primera bomba nuclear soviética, se encuentra en una reserva natural entre Nizhni Nóvgorod y Mordovia.

Soldados rusos cavaron en los últimos días un cortafuegos de ocho kilómetros de largo y 150 metros de ancho para proteger el Centro de los incendios forestales, y las autoridades retiraron todo el material radiactivo y explosivo para evitar el riesgo de accidente o fuga. El Centro de Sarov, antiguo Arzamás-16, acoge en la actualidad plantas de fabricación de armas atómicas y un instituto de física experimental.

Según datos del Ministerio de Situaciones de Emergencia, el área de bosques afectada por los incendios en todo el país se redujo en las últimas veinticuatro horas en poco más de 7.500 hectáreas, pese a que medio millar de fuegos forestales siguen activos. En total, de acuerdo a datos oficiales, desde el comienzo de la temporada estival, en todo el país han estallado 27.724 incendios forestales, que han devastado una área total de 856.903 hectáreas.