Las autoridades marroquís anunciaron ayer la muerte, tras su detención, del presunto cerebro de los atentados suicidas del 16 de mayo, que causaron 43 muertos, incluidos cuatro españoles. El fiscal anunció que el sospechoso --al que sólo identificó por su nombre de pila, Abdelhak, y por el alias El Zapatero -- murió durante su arresto "por enfermedad del hígado y corazón".

Los periodistas y diplomáticos quedaron sorprendidos por el hecho de que el régimen anunciara la muerte del presunto cerebro de los atentados, pues ni siquiera había informado oficialmente de su detención. El fiscal, que no precisó el día del óbito, aseguró que "una autopsia concluyó que falleció de muerte natural".