El expresidente sudafricano Nelson Mandela ha pasado este miércoles su cuarto día hospitalizado en estado crítico, mientras Sudáfrica sigue en vilo y alberga ya poca esperanza en su recuperación. Citando fuentes cercanas a la familia, el diario sudafricano 'The Citizen' asegura hoy que Madiba --nombre honorífico que se da a los ancianos en la tribu de Mandela-- respira de forma asistida, que el funcionamiento de sus riñones es muy bajo y que está sometido a diálisis renal periódicamente. Según el periódico, los médicos habrían planteado a la familia la posibilidad de desconectar a Mandela de las máquinas que le mantienen con vida. El presidente sudafricano Jacob Zuma, que ha visitado este miércoles por la tarde a Madiba, ha confirmado la gravedad del estado de que su ilustre predecesor y ha anulado una visita a Mozambique prevista para este jueves, según ha anunciado la presidencia sudafricana.

El último parte oficial hasta ahora sobre el pronóstico de Mandela fue divulgado ayer, martes, por la Presidencia del país, que aseguró que el antiguo estadista seguía en estado "crítico". El estado de Madiba pasó de "grave pero estable" a "crítico" el pasado domingo, después de que las señales de mejoría comunicadas por el Gobierno y la familia despertaran el optimismo sobre su restablecimiento.

"Mientras [Mandela] continúa en estado crítico en el hospital, debemos tenerle presente a él y a su familia en nuestros pensamientos y oraciones cada minuto", ha afirmado el presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma, durante un acto con un sindicato en Johannesburgo. "Deseamos celebrar el 95 cumpleaños de Madiba con el vigor propio de una vida de dedicación a la humanidad", ha añadido Zuma. Mandela cumplirá 95 años el próximo 18 de julio.

Rumores por la reunión urgente de la familia

Mandela, de 94 años, fue ingresado el pasado 8 de junio debido a la recaída de una infección pulmonar. El expresidente, que desde el pasado diciembre ha sido ingresado hasta en cuatro ocasiones, contrajo sus problemas respiratorios en las cárceles del régimen racista del "apartheid", en las que pasó detenido 27 años.

La falta de novedades sobre el pronóstico del icono de la lucha contra "apartheid" ha disparado en la prensa local los rumores sobre la reunión urgente que el clan Mandela celebró en su feudo de Qunu (suroeste) para tratar "asuntos delicados" de la familia. La cita, según el diario sudafricano 'The Star' --que cita fuentes del clan Mandela--, sirvió para decidir el lugar en que debe ser enterrado el líder 'antiapartheid'. De acuerdo con esa misma fuente, la familia está dividida entre los partidarios de que los restos de Madiba descansen en Qunu --donde creció y tiene una casa-- y los que prefieren enterrarle en Mvezo (sureste), donde nació.

Sin embargo, uno de los asistentes al encuentro de Qunu, el político cercano a la familia Bantu Holomisa, ha asegurado que el objetivo era "informar a los mayores (del clan) sobre el estado de Mandela", y negó que la "cumbre" tratara los detalles del funeral.

La visita diaria de Winnie

Como prácticamente cada día desde su ingreso hospitalario, el primer presidente negro de Sudáfrica ha recibido la visita de su exmujer, Winnie Madikizela-Mandela, y de sus hijas y nietos. La actual esposa de Mandela, Graça Machel, no se ha separado de su marido desde el momento de su internamiento.

El exmédico personal de Mandela, Vejay Ramlakan, ha sido visto este miércoles por segundo día consecutivo entrando al centro médico de Pretoria donde se encuentra el célebre paciente. En el exterior del hospital, decenas de periodistas sudafricanos y extranjeros volvieron a montar guardia a la espera de noticias. Volvió a repetirse también la peregrinación de curiosos y admiradores del mito sudafricano, así como los grupos de niños que cantaron canciones para Madiba y dejaron junto a la valla sus coloridos mensajes de apoyo.

Quien también se arrancó a cantar, en la reunión sindical a la que asistió, fue el presidente Jacob Zuma. El mandatario abrió el acto que presidía entonando los versos de una vieja canción en zulú sobre Madiba, cuya traducción al español reza aproximadamente: "Andaremos el largo camino, como dijo Nelson Mandela a sus seguidores". El jefe del Estado cantó varias estrofas moviendo el cuerpo al ritmo de la música, ante unos delegados sindicales vestidos con camisetas rojas que también se sumaron a la danza, informó la agencia de noticias sudafricana Sapa.

Obama no visitará a Mandela en el hospital

Entretanto, el presidente de EEUU, Barack Obama, ha llegado este miércoles a Senegal, inicio de una gira africana que está previsto que le lleve el fin de semana a Sudáfrica, antes de cerrar su viaje en Tanzania. La ministra sudafricana de Asuntos Exteriores, Maite Nkoana-Mashabane, anunció ayer, martes, que Obama no visitará a Mandela en el hospital. "En mi país, a mi edad y a vuestra edad, cuando la gente está enferma les dejamos tranquilos para que se recuperen", dijo la ministra a los periodistas, zanjando las especulaciones sobre una posible visita de Obama al hospital.

El primer presidente negro de Estados Unidos sí rendirá homenaje al primer presidente negro de Sudáfrica pasando por la isla de Robben (Ciudad del Cabo, suroeste del país), donde el héroe sudafricano estuvo preso durante 18 años.