Una fuerte ovación recibió ayer en el Parlamento cubano el expresidente Fidel Castro, quien, vestido de verde olivo, intervino por primera vez ante los diputados desde que hace cuatro años enfermó y delegó el poder a su hermano Raúl, de quien llegó acompañado a la Cámara.

En la última de sus múltiples y mediatizadas apariciones públicas de este verano, Fidel se diseñó una sesión parlamentaria a medida sobre política internacional. Pero hasta ayer no se le había podido ver con su hermano Raúl, lo que había dado pie a todo tipo de especulaciones sobre divisiones en el seno del poder que posiblemente la imagen de ayer no conseguirá frenar.

De pie y ante una tribuna, el líder cubano leyó su "mensaje a la Asamblea Nacional" en una intervención que duró unos 12 minutos, durante los que volvió a advertir de los peligros de una guerra nuclear, como ha venido haciendo en sus recientes reapariciones. Fidel resaltó que la decisión de iniciar una guerra con Irán está en manos del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y señaló que "simul- táneamente la conflagración estallaría en el cercano y el lejano Oriente y en toda Eurasia", según informa Efe.

Castro no había asistido a ninguna reunión de la Asamblea desde el 2006, cuando enfermó. Su hermano Raúl asumió oficialmente la presidencia en febrero del 2008. Fidel sigue siendo el comandante en jefe del Ejército y el secretario general del Partido Comunista. A punto de cumplir 84 años el viernes, el exmandatario retornó en julio a escena, después de cuatro años en los que solo se le había podido ver en fotografías y leer a través de sus "reflexiones" en el diario Granma . Su primera reaparición fue el 7 de julio, cuando visitó el Centro Nacional de Investigaciones Científicas. Siguieron otras visitas y reuniones con economistas, artistas, intelectuales, jóvenes o diplomáticos.

En ninguna de estas apariciones, Fidel se ha referido a la situación interna por la que atraviesa Cuba, que bajo la presidencia de su hermano ha emprendido una serie de tímidas reformas económicas. Tampoco ha dicho ni una palabra sobre la reciente excarcelación de disidentes políticos ordenada por Raúl.