El fiscal de Nueva York, Cyrus Vance, anunció a última hora del miércoles que no se retirará del caso contra el exdirector gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn, y que mantiene los cargos contra él por agresión sexual a una empleada del Hotel Sofitel de Manhattan. El abogado de la presunta víctima de Strauss-Kahn, Kenneth Johnson, había pedido que Vance se retirara del caso por considerar que la oficina del fiscal había filtrado "repetidamente" informaciones a los medios de comunicación que habían "desacreditado la reputación de la víctima". "Los habitantes de Nueva York tienen derecho a un ministerio público imparcial en un asunto de esta importancia", señaló Johnson en una carta dirigida al fiscal antes de apuntar que la oficina de Vance "desgraciadamante ha demostrado que es incapaz de cumplir esa condición". Johnson también ha denunciado un "posible conflicto de intereses" entre Strauss-Kahn y la acusación ya que una de las integrantes de la fiscalía, Karen Friedman Agnifilo, está casada con Marc A. Agnifilo, uno de los abogados del exdirector gerente del FMI. Sin embargo, el fiscal ha rechazado todas las consideraciones de Johnson y ha manifestado su "profundo desacuerdo" con la carta que este le ha enviado, por lo que se niega a retirarse del caso. "Toda insinuación de que la oficina del fiscal se debe retirar del caso no tiene ningún fundamento", ha afirmado Erin M. Duggan, portavoz de Vance. "El proceso continúa", ha añadido al término de una reunión con los abogados de Strauss-Kahn. La próxima vista judicial está fijada para el próximo 18 de julio.