Francia, Alemania y Rusia sumaron ayer esfuerzos para contrarrestar la estrategia belicista norteamericana y presentaron un memorando en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que pretende reforzar la labor de los inspectores de desarme. Desde Berlín, donde celebraron una rueda de prensa conjunta, el presidente francés, Jacques Chirac, y el canciller alemán, Gerhard Schröder, confirmaron que el objetivo de los tres países es "aumentar la capacidad de inspección, información, verificación y destrucción de armas de destrucción masiva en Irak". "éste es el mejor camino para desarmar a Irak", insistió el mandatario francés.

"La vieja Europa no olvida la tragedia de la guerra y la importancia de resolver el conflicto de Irak por la vía pacífica", añadió Schröder.

La iniciativa propone fijar unos calendarios detallados, "programa por programa", para el desarme de Irak en los ámbitos nuclear, químico, biológico y balístico, según explicó el jefe de la diplomacia francesa, Dominique de Villepin, en Bruselas, donde asistió al Consejo de Ministros de Exteriores de la UE.

FRACTURA EUROPEA

Y fue en Bruselas donde volvió a romperse la posición común pactada por la UE en la cumbre del pasado día 17: el ministro británico de Exteriores, Jack Straw, anunció la presentación de una segunda resolución, redactada junto a España y EEUU, que permitirá atacar a Irak. La ministra española, Ana Palacio, aseguró que esta segunda resolución, "no se contradice con la posición común europea". La nueva resolución, dijo, servirá para aumentar la presión política y militar sobre Irak.

MENSAJE DEL VATICANO

Mientras, el ministro de Exteriores del Vaticano, monseñor Jean-Louis Tauran, aseguró ayer que cualquier acción unilateral contra Irak será un "crimen" contra el derecho internacional y contra la paz, porque "sólo el Consejo de Seguridad de la ONU tiene poder para decidir sobre una intervención armada".