La Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) ha informado hoy de la muerte de dos insurgentes durante los combates de un comando talibán contra las fuerzas afganas en el centro de Kabul, donde se produjo una nueva explosión en una zona comercial, según distintas fuentes.

La ISAF ha indicado en un comunicado que está cooperando con las fuerzas afganas para "contener agresivamente" el ataque de los insurgentes, quienes son los autores desde esta mañana de varias explosiones en Kabul.

Un grupo de insurgentes ha penetrado en el centro comercial Feroshgah e Afghan de Kabul tras causar varias pequeñas explosiones en una zona donde se encuentran el Banco Central, los Ministerios de Justicia y Finanzas, el Palacio Presidencial y el Hotel Serena.

CORTADAS LAS CARRETERAS

"Las fuerzas de la policía han cortado todas las carreteras en la zona y, según las informaciones iniciales, han matado al menos a dos insurgentes armados en el centro comercial tras controlar el edificio", ha indicado la organización en el comunicado.

Un rato después del inicio de ese tiroteo, el centro de Kabul hubo otra explosión en el centro comercial Gulbahar, situado en las cercanías del Ministerio de Interior, según han relatado varios testigos.

COCHE CON EXPLOSIVOS

De acuerdo con el canal afgano Tolo Tv, la nueva explosión provino de un vehículo y ha causado varios muertos o heridos.

El portavoz talibán Zabiulah Muyahid ha explicado que "20 suicidas" se encuentran en la capital afgana con el propósito de atacar varios ministerios, tras comentar a Tolo TV que uno de ellos se ha hecho estallar cerca del Palacio Presidencial.

CIERRE DE EDIFICIOS

Las autoridades han cortado las principales arterias viarias y han decretado el cierre de los edificios gubernamentales en la ciudad, donde los principales hoteles también han clausurado sus puertas, según el portal afgano de noticias Quqnoos.

La antes segura Kabul, donde la presencia de tropas extranjeras y el despliegue policial son masivos, ha sido escenario de frecuentes atentados suicidas y ataques con proyectiles contra edificios importantes en los últimos dos años.

El último ataque importante se produjo el pasado 15 de diciembre, cuando cinco personas murieron en un atentado suicida perpetrado frente al hotel Heetal, frecuentado por clientes extranjeros y cercano a unas oficinas gubernamentales.