Los combates entre las fuerzas de Muamar Gadafi y los rebeldes libios siguen pero no acaban de desencallar el conflicto a favor de ninguno de los bandos. Las tropas gubernamentales han logrado frenar el avance de los insurgentes hacia el enclave petrolero de Brega y han forzado el repliegue de los insurrectos hacia el este, en Ajdabiya, donde los rebeldes se han retirado de la entrada de la ciudad y se han concentrado en el centro debido a la ofensiva gadafista.A pesar de que el sábado los bombardeos de la OTAN sobre posiciones gadafistas permitió a los rebeldes avanzar hacia Brega, a 80 kilómetros de Ajdabiya, el domingo las tropas gubernamentales llegaron a 20 kilómetros de la entrada a Ajdabiya por el oeste y los intensos ataques obligaron a los rebeldes y a los habitantes de esta ciudad a huir. Los insurgentes han logrado, por ahora, mantener el control de este enclave aunque han tenido que levantar grandes barricadas para frenar la ofensiva gadafista.El lanzamiento de cohetes en la carretera que une Brega y Ajdabioya dejó solo el sábado un balance de 8 muertos y 27 heridos.Situación crítica en MisrataEn Misrata, que también es objeto desde el viernes de una violenta ofensiva por parte de las tropas de Gadafi, la situación es peor. Las últimas cifras facilitadas este lunes por el hospital de la ciudad hablan de al menos mil muertos, el 80% de los cuales son civiles, y 3.000 heridos desde que empezaron los combates a finales de febrero. El director del hospital, Khaled Abou Falgha, ha asegurado que "el 80% de los muertos son civiles" y ha subrayado que las 60 camas que tiene el hospital están ocupadas por heridos en los combates.Falgha ha explicado que desde la semana pasada se ha detectado un incremento de las heridas de gravedad causadas por bombas y armas prohibidas que las tropas gadafistas utilizan desde el jueves, según han denunciado los rebeldes y la organización Human Rights Watch. El domingo, al menos 17 personas murieron y 71 resultaron heridas en la ciudad, situada a unos 200 kilómetros al este de Trípoli.