Una fuga de gas en una fábrica de la localidad de Rouen, ubicada 120 kilómetros al oeste de París, ha cubierto la capital francesa con un fuerte olor, aunque sin riesgo para la salud pública, según la Policía.

Un miembro de la Policía ha informado a la agencia de noticias Reuters de que se trata de una fuga de mercaptano, un compuesto sulfurado que se usa como aromatizante del gas natural, precisamente, para detectar una fuga, porque el gas natural es inodoro.

El diario digital 'Tendanceouest' ha detallado que la fuga se ha producido en la fábrica que la empresa química Lubrizol posee en Rouen y que está provocando migrañas, náuseas e irritaciones entre los vecinos.

Al parecer, la Policía parisina ha recibido numerosas llamadas a lo largo de la madrugada del martes alertando del fuerte olor a combustible que se ha apoderado de la capital francesa.