Los incidentes relacionados con la energía nuclear y sus formas de producción se miden según una escala internacional llamada INES y elaborada por el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), un organismo de las Naciones Unidas con sede en Viena.

La INES, siglas en inglés de Escala Internacional de Sucesos Nucleares y Radológicos, clasifica los sucesos en siete niveles y los separa según sean referidos a instalaciones o a transporte. Se aplica desde 1990 aunque recoge muchos incidentes anteriores según los datos de que se disponían.

El nivel 1 es la "anomalía" e incluye la sobreexposición de una persona del público a niveles superiores a los que aceptaría el cuerpo humano en un año, problemas menores con componentes de seguridad en una central nuclear o pérdidas o robos de fuentes radiactivas durante los transportes.

El nivel 2 es el "incidente" y se considera que incluye la sobreexposición de un trabajador nuclear por encima de un determinado límite (10 mSV), cuando se registran niveles de radiación superiores a 50 mSv/h en zonas de radiación o contaminación importantes, y fallos en el embalaje de una fuente radiactiva o en las disposiciones de seguridad aunque sin consecuencias.

El nivel 3 o "incidente importante" es la exposición humana a 10 veces el límite de radiactividad tolerado, contaminaciones graves de zonas o instalaciones, fallos graves en la manipulación y los llamados "cuasiaccidentes". En este nivel se considera actualmente Fukushima y tiene antecedentes como el incendio en la central de Vandellòs en 1898 que destruyó los sistemas de seguridad de la central.

El nivel 4 es ya "accidente" e incluye liberación de materiales radiactivos sin más afectación que aplicar medidas a los alimentos y fusión de combustible. A este nivel ha habido, por ejemplo, un incidente en la central nuclear francesa de Saint Laurent des Eaux en 1980.

El nivel 5 ya es "accidente con consecuencias de mayor alcance" y suele implicar muertes. Incluye liberación de materiales radiactivos con necesidad de aplicar contramedidas. Supone daños graves en el núcleo del reactor. A este nivel se consideró el incidente de la central de Three Mile Island en EEUU en 1979.

El nivel 6 ("accidente importante") y el nivel 7 ("accidente grave") ya con los niveles máximos, con liberación de sustancias radiactivas generalizadas. De momento, solo han afectado a instalaciones rusas, con su caso máximo en Chernobil, en 1986, que fue nivel 7.