El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha asegurado, en referencia a la muerte del dictador chileno Augusto Pinochet: "Los procesos judiciales tendrán que seguir, y van a seguir porque en cuanto a la autoría (de los crímenes) no solamente Augusto Pinochet era el único responsable". Por su parte, Isabel Allende, hija del expresidente derrocado por Pinochet, ha pedido que "los jueces sigan haciendo su trabajo". En declaraciones a la Cadena SER, Garzón ha explicado que los procesos deben continuar por "hay muchas otras personas que deben de ser investigadas" y ha advertido: "Los jueces, en cualquier parte del mundo, debemos trabajar con agilidad para que no nos ocurra la misma historia". FrustraciónEl juez ha dicho que cuando conoció la noticia de la muerte de Pinochet sintió "frustración porque la justicia no haya podido llevar a término algunos procesos con la sentencia condenatoria", aunque ha reconocido que los jueces, también los chilenos, "han hecho grandes avances aunque no los suficientes para que ese resultado (la condena) se produjera".Además, Garzón, ha tenido un recuerdo para las víctimas de Pinochet porque, según ha dicho, son "las grandes luchadoras" y las que han logrado que "Pinochet al final haya podido tener en los últimos 10 años de su vida un panorama judicial bastante en contra".Allende, con "serenidad"Isabel Allende, hija del expresidente Salvador Allende, derrocado por Augusto Pinochet mediante un golpe de Estado el 11 de septiembre de 1973, ha asegurado que ha recibido la muerte del dictador "con serenidad" y "con la frente muy en alta. Tenemos claro lo que fuimos y nuestros valores," ha afirmado. Allende ha afirmado que "hoy se cierra el capítulo Pinochet" pero ha coincidido con el juez en que hay más de 400 procesos abiertos por los crímenes de la dictadura chilena, por lo que "los jueces tendrán que seguir haciendo su trabajo".