El Parlamento de Georgia convocó ayer elecciones presidenciales para el próximo 4 de enero durante la sesión extraordinaria, celebrada dos días después de la dimisión forzosa del presidente del país caucásico, Eduard Shevardnadze. De los 169 diputados de la Cámara 155 apoyaron la fecha propuesta por la presidenta interina georgiana, Nino Burdzhanadze.
El Parlamento está formado por 235 diputados, elegidos en 1999. Según la Constitución, las presidenciales debían celebrarse en un plazo de 45 días tras la dimisión del jefe del Estado. "Nuestra tarea principal es unir todas las fuerzas políticas para sacar al país de la crisis", dijo antes de la votación Burdzhanadze.
FIELES A SHEVARDNADZE Sin embargo, 66 diputados de los dos partidos que apoyaron a Shevardnadze durante la crisis política que terminó en su dimisión boicotearon la sesión. Los legisladores de los partidos oficialistas, Nueva Georgia y Renacimiento, dijeron que no colaborarán con los "golpistas" de la oposición y que apelarán todas las decisiones del nuevo poder ante el Tribunal Constitucional.
