El Ministerio de Defensa británico trató de destruir unos documentos relacionados con el experto en armamento, David Kelly, tres días después de su muerte, según informó ayer el diario londinense The Daily Telegraph . Kelly presuntamente se suicidó nueve días después de que fuera señalado como la fuente de la BBC en una información que acusaba al Gobierno de "maquillar" un dosier sobre las armas de destrucción masiva de Irak.

Los documentos, que supuestamente contenían la estrategia mediática que el ministerio pretendía seguir respecto al caso, fueron encontrados por unos guardias de seguridad en una bolsa destinada a la incineración. No está claro si los papeles fueron destruidos o no, pero según el periódico británico, los guardias de seguridad avisaron a la policía tras encontrarlos.

Desde Defensa se ha negado que los papeles encontrados el 20 de julio fueran importantes para la investigación sobre la muerte de Kelly y se ha calificado como "desmesurada" la reacción de los guardias al avisar a la policía.

La noticia salió a la luz un día después de que el juez James Hutton iniciara en Londres la investigación que pretende esclarecer las circunstancias que rodearon la muerte del experto.

El primer ministro, Tony Blair, y el titular de Defensa, Geoff Hoom, serán algunos de los testigos que el juez encargado de la investigación llamará a declarar.