a muerte de un retenido en un centro de detención británico para inmigrantes provocó anoche "serios incidentes", que causaron daños y provocaron la intervención de la policía, informa el Ministerio de Interior del Reino Unido.La revuelta se registró en el centro de Harmondsworth, cerca del aeropuerto londinense de Heathrow, después de que, sobre las 19.00 GMT, fuera hallado ahorcado un detenido que, según fuentes oficiales, al parecer se suicidó.Esto provocó que parte de los detenidos prendieran pequeños fuegos y causaran algunos daños en las instalaciones, por lo que acudieron al lugar docenas de policías, un helicóptero y un vehículo de bomberos.Según la cadena de televisión BBC, los incidentes no causaron al parecer heridos graves.El Ministerio de Interior ha informado esta mañana que se pusieron en marcha los planes de contingencia previstos por el Sistema de Prisiones y algunos funcionarios abandonaron el recinto, pero han dicho que la situación "ha comenzado a calmarse".El centro de Harmondsworth abrió en 2001 para acoger a detenidos por el Servicio de Inmigración cuyo visado haya vencido, a inmigrantes sin papeles y a aquellas personas que se les haya denegado el asilo y vayan a ser devueltas a su país.Reforma de la prisiónEn septiembre del año pasado se ordenó una reforma de esta prisión para inmigrantes, con capacidad para 500 personas, por considerar que no era segura ni para los funcionarios ni para los detenidos.Anne Owers, inspectora jefe de prisiones, concluyó entonces que no había "un entorno seguro y estable" pese al duro trabajo de su personal, y que se producían "crecientes niveles de desórdenes, daños e intentos de huida", con una media de siete asaltos a la semana.Un año después de abrir, el centro atendía a unos 12.000 solicitantes de asilo, cuatro veces más de su capacidad, indicó Owers en su informe.