El Parlamento griego ha aprobado la ley que permite aplicar de forma inmediata el plan de ajuste para que el país siga recibiendo ayuda externa y evite la quiebra. La ley ha sido aprobada por 155 votos a favor, 136 en contra y cinco abstenciones, en una votación en la que participaron los 296 diputados presentes en la cámara de 300 escaños. Los 154 diputados del gobernante Movimiento Socialista Panhelénico (PASOK) votaron a favor de la ley y de todos sus capítulos. También aprobó la ley la disidente conservadora Elsa Papadimitríu, que hizo lo mismo ayer durante la votación del programa de ajuste y anunció su abandono del partido conservador Nueva Democracia, que se queda con 85 escaños. Los votos en contra de la ley provinieron de Nueva Democracia, que, sin embargo, votó a favor de 21 capítulos de un total de 49 de la ley. El resto de los partidos de la oposición votaron en contra de toda la ley.

El proyecto de ley aprobado incluye las medidas de austeridad necesarias para seguir recibiendo la ayuda exterior con el fin de evitar la bancarrota o impago de la deuda pública.

Tras el voto positivo del miércoles, con 155 votos a favor de los 300 escaños parlamentarios, se esperaba un resultado similar respecto a este proyecto de ley, necesario para proceder a la implementación inmediata de las medidas de ajuste.

El voto positivo implica que Grecia recibirá el próximo tramo, de 12.000 millones de euros, de la ayuda del Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Unión Europea (UE) sin el cual Grecia hubiese tenido que declararse insolvente en julio.

Los altercados ante el Parlamento

Las calles de Atenas han vivido en los últimos días fuertes disturbios. Las brigadas antidisturbios usaron gases lacrimógenos el miércoles contra grupos radicales que tiraron cócteles molotov y piedras durante las manifestaciones en protesta contra las impopulares y dolorosas medidas de ahorro del Gobierno y contra las previstas privatizaciones de empresas estatales.

Esas protestas se añadieron a una huelga de 48 horas convocada por los sindicatos mayoritarios por la misma razón.

Según los últimos datos oficiales, más de un centenar de personas heridas en los incidentes en Atenas tuvieron que ser hospitalizadas y 181 fueron atendidas de urgencia, de ellas, 56 policías.

Asistencia médica

Además, más de 700 personas necesitaron asistencia médica urgente en la plaza central de Sintagma, frente al Parlamento, por problemas respiratorios causados por los gases lacrimógenos, según denunciaron a los medios miembros de la unión de farmacéuticos de Atenas.

Un total de 43 personas fueron detenidas durante los disturbios y una docena de ellos comparecerán hoy ante un tribunal en Atenas.

También hubo daños materiales de diversa índole, como la rotura de escaparates de bancos y tiendas, así como destrozos en paradas de autobuses y quioscos.