Unos paneles de madera en uno de los salones de reuniones de la sede de las Naciones Unidas en Ginebra (Suiza) escondían un "sofisticado sistema de escuchas", según confirmó ayer la organización. ¿Quién lo puso? ¿Cuándo? La investigación, abierta por la ONU "este otoño", no logró dar respuesta a ninguna de las dos preguntas.

El asunto saltó a la luz pública el pasado jueves por la noche, cuando la televisión suiza TSR emitió un reportaje de investigación. Ayer, la ONU no pudo más que confirmarlo. El salón, bautizado como Salón Francés, fue reformado hace unas semanas (la ONU se ha limitado a decir "este otoño") y unos trabajadores hallaron el artilugio. Esta sala ha sido el escenario de varias reuniones sobre la guerra de Irak.

Un experto en escuchas consultado por la TSR explicó que, por las fotos del aparato, cree que procede de algún país de Europa del Este y tiene "tres o cuatro años".

"COMO UN QUESO SUIZO" El asunto revolucionó la sede en Ginebra. Un miembro de la seguridad del cuartel general de la ONU dijo a Reuters, desde el anonimato, que aquello "es como un queso suizo". El suceso hace pensar en las denuncias de Clare Short, exministra de Cooperación de Tony Blair, en febrero. Short aseguró que los servicios secretos británicos habían espiado al secretario general de la ONU, Kofi Annan, antes de la invasión de Irak.