El movimiento islamista Hamás se encuentra enfrascado en un doble enfrentamiento con Israel y con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbás (Abú Mazen ) y Al Fatá. Tras la muerte el viernes de siete palestinos en un bombardeo israelí en una playa de Gaza, el brazo armado de Hamás rompió ayer la tregua de 16 meses con Israel y reanudó el lanzamiento de cohetes artesanales Qasam. En Ramala, Abú Mazen convocó para el 26 de julio un referendo sobre la Iniciativa de los prisioneros , que implícitamente reconoce a Israel, a lo que Hamás reaccionó denunciando un "golpe de Estado" de Al Fatá.

Al día siguiente de la tragedia de la playa todo el mundo se mantuvo fiel a sus papeles. El brazo armado de Hamás cumplió su amenaza de romper la tregua y disparó 15 Qasam contra territorio israelí sin causar víctimas y Abú Mazen convocó el referendo. En una sola cosa coincidieron ayer Abú Mazen y el primer ministro de la ANP, Ismail Haniya: en calificar con duras palabras --"matanza", "crimen de guerra"-- el bombardeo. Como ha decidido Abú Mazen, los palestinos deberán responder o no a la siguiente pregunta: ¿Está usted de acuerdo con el documento de acuerdo nacional, el documento de los prisioneros? Este texto, redactado por presos en cárceles israelís, reconoce implícitamente a Israel al plantear la formación de un Estado palestino en Gaza, Cisjordania y Jerusalén Este y exige el derecho al retorno de los refugiados y la entrada de Hamás y la Yihad Islámica en la Organización para la Liberación de Palestina (OLP).

EL ULTIMO PASO Planteado por los presos como una iniciativa con la que salvar el enfrentamiento entre la presidencia y el Gobierno de la ANP, Abú Mazen ha convertido el texto en la fórmula para obligar a Hamás a adherirse a sus postulados respecto a Israel, en un intento casi desesperado de salvar el boicot internacional al Ejecutivo liderado por los islamistas.

Pero Hamás considera la consulta el último paso de una campaña de Abú Mazen y la comunidad internacional para derrocar a un Gobierno elegido democráticamente hace menos de cinco meses. El movimiento islamista teme que de vencer el sí en el referendo, Abú Mazen se sentirá legitimado para disolver el Parlamento y convocar elecciones.

Gaza volvió a vivir ayer enfrentamientos en el funeral del mayor Basam Qutub, un oficial de la Seguridad Preventiva asesinado por encapuchados la madrugada. Al Fatá culpó a Hamás de la muerte y, en las exequias, se desató un tiroteo entre agentes de la Seguridad Preventiva y milicianos de Hamás que se saldó con cuatro heridos.