El presidente francés, François Hollande, ha afirmado este domingo que Francia está haciendo todo lo posible para lograr la liberación de los ocho franceses que están secuestrados en la región africana del Sahel. "Francia está trabajando en ello con determinación y de forma responsable. Ninguna pista será ignorada o dejada fuera", ha afirmado Hollande tras reunirse con familiares de los rehenes, preocupados ante la escalada que supone la intervención militar francesa en Malí.
Además, Hollande se ha comprometido a que "el Gobierno seguirá informando a los familiares de los secuestrados y prestándoles todo el apoyo que necesiten", según un comunicado oficial del Elíseo.
Desde el inicio de la operación francesa en Malí, el 11 de enero, han muerto dos rehenes franceses. El primero fue el agente secreto Denis Alex, secuestrado en Somalia y ejecutado por sus captores tras un intento fallido de rescate. El otro fallecido es Yann Desjeux, uno de los rehenes del grupo yihadista que tomó las instalaciones de la planta de gas argelina de In Amenas.
Los otros secuestrados son Thierry Dol, Daniel Larribe, Pierre Legrand y Marc Féret, capturados por Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) el 16 de septiembre de 2010 en una explotación de uranio del norte de Níger. También están secuestrados por AQMI Serge Lazarevic y Philippe Verdon, geólogos que trabajaban para una empresa maliense cuando fueron apresados, el 24 de noviembre de 2011 en el noreste de Malí.
El séptimo ciudadano francés secuestrado en la región es Gilberto Rodríguez Leal, en cautividad desde el 20 de noviembre de 2012. Rodríguez Leal fue secuestrado en el oeste de Malí por milicianos del Movimiento de Unidad para la Yihad en África Occidental (MUYAO).
