"Ja, todo vuelve", dijo un joven, en la Universidad Ricardo Palma, antes de votar donde lo haría Ollanta Humala, en el acomodado barrio de Surco. Detrás, una mujer que huele a Chanel 5 se sobresaltó. En la primera vuelta, Humala había sido aquí objeto del escarnio de quienes lo ven como una amenaza. Ella creyó que las cosas se repetirían y, por instinto, se aferró a su cartera.

Pero el joven hablaba de otro retorno: los miembros del grupo Los Saicos se han visto las caras. A principios de los 60 --le explicó-- cantaban en español "echemos abajo la estación de tren...". Hoy se les considera los padres mundiales del punk que nació en los 70. Dos de Los Saicos regresaron de EEUU para ser homenajeados. "¿Ustedes eran rebeldes?", les preguntaron. "No, solo buscábamos chicas",,dijeron. Hoy, Erwin Flores es científico de la NASA y César Castrillón, financiero.

Alan García también regresa por su revancha. Ya no busca "echar abajo" las viejas estructuras económicas, como pensaba durante el Gobierno (1985-90) que acabó en medio del caos. A punto de cumplir los 60, levanta la bandera del "cambio responsable". Entre los malos recuerdos del pasado y el temor por el porvenir, muchos optaron por darle una segunda oportunidad. Como la señora del perfume estridente, la que nunca escuchó a Los Saicos y hubiera preferido no oír nunca más a García. Esperaba su turno para votar leyendo en la revista Caretas una entrevista a Ulises Humala. Es el hermano del candidato que quiere resucitar el nacionalismo militarista de décadas atrás. Ulises cuenta que Ollanta sigue influenciado por su padre, Isaac, un abogado que simpatizaba con la guerrilla y "terminó siendo fascista".

Gobierno impopular

Keiko Fujimori fue la congresista más votada en la primera vuelta. Ayer dijo que desde el Parlamento trabajará para que su padre, el prófugo Alberto Fujimori, vuelva al poder. "Me pedían que me fuera y ahora me aplauden",,ironizó el presidente, Alejandro Toledo. Aunque en estos cinco años la economía creció más del 25%, su Gobierno fue muy impopular. Toledo dijo que no es tiempo de pensar en futuras candidaturas. Pero en el país de los "males menores", él también puede volver pronto.