El incendio declarado anoche en el Hospital 17 de Moscú, en el que se rehabilitan drogadictos, y que costó la vida a 43 personas fue casi con toda probabilidad provocado, según ha revelado el inspector jefe de los bomberos de la capital rusa, Yuri Nenashev.

"Estamos seguros al 90%" de que el incendio fue provocado, ha declarado Nenashev. "Personal de nuestro laboratorio ha constatado que en el lugar donde se originó el incendio no había ningún tipo de cables o artefactos eléctricos", ha precisado. Sin embargo, el jefe de la fiscalía de Moscú, Yuri Syomin, ha dicho que los investigadores no han descartado otras hipótesis.

El fuego se produjo en un escritorio de madera en una cocina situada en el segundo piso del hospital, un factor que llevó a sospechar a que el incendio pudo haber sido premeditado.

Bloqueada la única vía de escape

El fuego bloqueó la salida, y la única vía de escape situada al otro lado del pasillo estaba bloqueada por una puerta cerrada, según ha explicado Nenashev. Además, las ventanas estaban protegidas con barrotes con candados que el personal del centro no logró abrir.

Las 43 mujeres intoxicadas por el humo ya habían fallecido cuando llegaron los bomberos, que han confirmado que la llamada les había llegado demasiado tarde, y las víctimas mostraban signos de haber intentado escapar. "A juzgar por el lugar donde se hallaron los cuerpos, realmente intentaron salir", ha dicho Alexander Chupriyanov, ministro asistente de situaciones de emergencia.

El portavoz del departamento de bomberos de Moscú, Yevgeny Bobylyov, ha declarado que los peritos siguen trabajando en el lugar de los hechos, el Hospital 17, ubicado en la parte sur de Moscú, pero que ya estaba claro que la primera llamada telefónica a los bomberos había llegado muy tarde.

Sin ayuda del personal del centro

"En segundo lugar, el personal del hospital trabajó pésimamente, no tomaron las medidas necesarias para evacuar a los pacientes durante las primeras etapas del incendio", ha dicho.

Un total de 160 personas fueron desalojadas del edificio de cinco pisos, y 10 personas fueron hospitalizadas por intoxicación de monóxido de carbono, según ha informado Bobylyov.

Ha agregado que todas la víctimas mortales eran mujeres que padecían drogadicción y que se encontraban encerradas en habitaciones con ventanas enrejadas, lo que dificultó la labor de los bomberos.

Muros recubiertos con material plástico

La mayoría de ellas, según el portavoz, ha muerto de asfixia por la combustión de los materiales plásticos que recubrían los muros de las habitaciones.

Las autoridades han precisado que entre las víctimas se encontraban dos mujeres miembros del personal del establecimiento médico.

Nenashev ha señalado que el elevado número de víctimas se ha debido a que una de la escaleras de evacuación de hallaba cerrada y a que el paso hacia la segunda lo impedía el humo. Y ha revelado que el Ministerio de Emergencias había demandado la suspensión de las actividades del hospital por violaciones a las normas de seguridad para la prevención de incendios: "El 20 de marzo un tribunal de justicia examinó nuestra demanda, pero lamentablemente se limitó a amonestar a la administración del hospital".

Para Chupriyanov, "el solo hecho de esta muerte masiva de personas es motivo para realizar inspecciones en establecimientos similares en todas regiones y repúblicas de Rusia".