Los familiares de un afroamericano que murió en 2018 a manos de la policía mientras circulaba con su bicicleta en la ciudad de Vallejo, en California (EEUU), recibirán 5,7 millones de dólares, anunciaron este miércoles funcionarios municipales de esa urbe.

El hombre afroamericano en cuestión era Ronell Foster, de 33 años, que falleció en febrero de hace dos años tras recibir un disparo en la nuca de un agente del Departamento de Policía de Vallejo, Ryan McMahon, que dijo que tuvo que apretar el gatillo porque el hombre se negó a ser detenido y se enzarzó en una disputa violenta con él.

Trataban de detenerlo

Según documentos policiales, McMahon intentó detener a Foster tras detectar que el afroamericano manejaba su bicicleta sin luz por la noche, incumpliendo una normativa local.

Entonces, Foster huyó del agente, lo que "provocó una persecución a pie, seguido de una violenta lucha física entre ambos". Durante el altercado, el agente "disparó su arma de fuego de servicio en defensa propia, impactando al sujeto (en la nuca)", que falleció en la escena.

En enero de este año, McMahon fue absuelto de irregularidades por la oficina del fiscal de distrito del condado de Solano, que declaró justificado el uso letal de la fuerza por el agente después de una investigación que incluyó imágenes de cámaras corporales, según el diario Los Angeles Times.

Indemnización para la familia

Sin embargo, la familia de Foster presentó una demanda civil contra el propio agente y la ciudad, que ha resultado este miércoles en una recompensa de 5,7 millones de dólares para los seres queridos del hombre fallecido.

La ciudad de Vallejo abonará 500.000 dólares a la familia de Foster, mientras que el resto de la sanción la pagará la aseguradora municipal. La abogada de la familia, Adanté Pointer, señaló a medios locales que los familiares están "felices de que la verdad finalmente haya salido a la luz".

"Lo que la familia encontró más inquietante son las mentiras que la ciudad lanzó para justificar su muerte cuando supieron en todo momento que la muerte de Ronell no estaba justificada y que la conducta del oficial fue completamente incorrecta", subrayó.

La resolución de esta demanda llega pocas semanas después de que otro hombre afroamericano que circulaba en su bicicleta, Dijon Kizzee, muriera a manos de otro agente de policía en Los Ángeles, quien también argumentó que usó el arma en defensa personal.